Tendinopatía calcificante de hombro

La tendinopatía calcificante del hombro es una de las enfermedades más dolorosas que se pueden ver en la consulta. Consiste en que una parte del tejido normal de los tendones del manguito rotador se sustituye por un depósito de calcio. Con el tiempo, este depósito tiende a reabsorberse y el problema se resuelve, pero hasta que se completa el proceso se puede producir bastante dolor.

No se conoce con exactitud las causas por las que se acumula calcio en los tendones del manguito rotador. No sucede en todas las personas y habitualmente se observa a partir de la década de los treinta años, hasta los sesenta años aproximadamente.

La queja principal cuando hay una calcificación en el tendón es el dolor, que puede aparecer de dos formas. En algunos pacientes, es un dolor sordo y mantenido que no impide realizar la mayoría de las actividades cotidianas. En otros, en cambio, tiene lugar una “crisis” de dolor que comienza de forma repentina y puede durar en torno a una semana. Este dolor se suele describir como muy intenso, que dificulta incluso dormir por la noche, y cualquier actividad provoca un aumento insoportable del mismo.

Para el diagnóstico suele ser suficiente realizar una radiografía simple, pero con mucha frecuencia se echa mano de la ecografía o de la resonancia magnética para ver el resto de estructuras del hombro.

El tratamiento es principalmente conservador, es decir, no quirúrgico. En los casos de crisis de dolor muy intensas, el objetivo primordial es eliminar rápido dicha crisis, para lo cual una infiltración de un corticosteroide en la bursa subacromiodeltoidea puede ser efectivo, además de una tanda de analgésicos orales. Una vez pasado el episodio, y en los casos de dolor más cronificado, el tratamiento suele consistir en fisioterapia o en ondas de choque. En casos en los que esta primera aproximación no es efectiva, la eliminación de la calcificación por medio de un lavado percutáneo con control ecográfico (conocido como “barbotaje”) suele ser resolutiva. La intervención quirúrgica se reserva para casos muy seleccionados y, debido a todas las alternativas de tratamiento que tenemos en la actualidad, cada vez se realiza con menos frecuencia.